Las restricciones al tabaco en Japón traen consigo controversia y nuevas tecnologías

En un país donde el negocio del tabaco se distribuye en un 60% a través de máquinas expendedoras, la introducción de una nueva normativa más restrictiva por parte de su Gobierno conlleva consecuencias conflictivas. Así, el Ministerio japonés de Finanzas ha ido introduciendo paulatinamente desde el año pasado un nuevo sistema de venta; aquellos que deseen comprar tabaco en expendedoras, deberán primero solicitar la tarjeta de circuito integrado "TASPO" al Instituto Japonés del Tabaco.
Aunque el sistema parece ser efectivo en lo que a la protección de venta a menores se refiere, también es cierto -como publica el diario nipón The Japan Times- que hay una buena parte de los consumidores que se queja de la falta de privacidad del sistema; y es que, para conseguir una tarjeta TASPO, es necesario que el interesado presente una fotografía personal y una copia de su documento de identidad.
Como consecuencia -y teniendo en cuenta que el nuevo sistema no es universal- la Asociación Japonesa de Franquicias ha registrado un aumento del 4,2 por ciento en las ventas de las llamadas "tiendas de conveniencia" (gasolineras, tiendas 24 horas, etc.), en relación al pasado año. Y es que este tipo de tiendas sigue manteniendo el sistema tradicional de venta en máquinas expendedoras.
Teléfono cartera
Si por algo ha destacado la industria japonesa es por lanzar innovaciones tecnológicas, con especial atención al mercado del vending. Aparte de la controvertida introducción del sistema de tarjetas TASCO, el gobierno de Japón está intentando promocionar en el mercado exterior el sistema FeliCa, desarrollado por Sony Corporation. Este chip se puede instalar en un teléfono móvil y permite realizar pagos a través del mismo, tanto en máquinas expendedoras adaptadas, como en puntos de venta en estaciones de ferrocarril y similares.














