Nestlé inauguró ayer el centro de producción más caro de su historia

Nestlé inauguró ayer en Anderson, en el estado americano de Indiana, su fábrica más grande de preparados asépticos para beber. El centro de distribución y la fábrica de última generación proporciona a Nestlé, según fuentes de la propia firma, una plataforma única para impulsar sus estrategias en salud, nutrición y bienestar y marca las pautas para las futuras fábricas de preparados para beber de Nestlé en todo el mundo. El gobernador de Indiana, Mitch Daniels, estuvo presente en la presentación oficial, el alcalde de la ciudad, el director general de Nestlé, Paul Buckle y la presidenta y directora ejecutiva de Nestlé USA, Brad Alford.
Las instalaciones de Anderson, de casi 82.000 metros cuadrados, cubren un espacio del tamaño de más de 300 pistas de tenis y tienen por objetivo hacer frente a la creciente demanda en los Estados Unidos de los preparados de "Nesquik" y de los productos líquidos "Coffee-Mate".
Entre agosto de 2006 y junio de 2008, Nestlé invirtió 359 millones de dólares para construir la fábrica y el centro de distribución, la inversión única más grande de la historia de la compañía. Además, el pasado agosto, la firma suiza anunció que invertirá 170 millones de dólares más para ampliar en 2011 las instalaciones en más de 92.000 metros cuadrados. En total, se espera que en 2011 se hayan creado más de 500 trabajos.














