Los nuevos peajes en Portugal traban el comercio

HOSTELVENDING.com | 09/12/11.- Desde ayer, los camiones y automóviles provenientes de Galicia, Andalucía y Castilla y León se están topando con un nuevo peaje en la frontera de Portugal. Como medida para hacer frente a la crisis económica, el Gobierno luso ha puesto en práctica esta medida, que ya está provocando las primeras reacciones adversas.
La medida fue aprobada hace apenas diez días y entró en vigor en el día de ayer, pillando desprevenidos a muchos de los conductores que esperaban pasar hacia el país vecino sin más dilaciones. Las tarifas que deben pagar son las siguientes: 1,75 euros para los turismos y motocicletas; 3,05 euros para las furgonetas de gran tamaño; 3,95 euros para los camiones de tamaño reducido; y 4,40 euros para los camiones de gran tamaño.
Para aquellos conductores que incumplan con el pago de este peaje, la multa a sancionar es de un máximo de 150 euros. Los peajes afectan a: la A-25, que conecta Castilla y León con Aveiro, la A-22 que une Andalucía y el Algalrve, la A-24 que conecta Galicia con Viséu y la A-23, que une a Guarda y Castelo Branco.
Como decíamos, las primeras críticas no han tardado en sucederse desde el lado español. Así, la Junta de Andalucía ha reconocido que, aunque el Estado portugués "es soberano", ha solicitado ya que se retire el peaje, según informa el diario Público. Por su parte, la patronal andaluza FOE ha declarado que esta medida es una "barrera al desarrollo económico de Andalucía y el Algarve" y exige una reducción especial a los andaluces, como región transfronteriza.
Por su parte, la Federación Española de Transportistas (Fenadismer) ya interpuso una denuncia contra el Estado portugués, según comunicó la organización el pasado lunes, 5 de diciembre. La denuncia se basa en que la medida contempla un sistema de exenciones y bonificaciones en el pago de los peajes "exclusivamente a las personas físicas y jurídicas que tengan su residencia o domicilio social en el área de influencia de las autovías", detalla el comunicado. "Se trata de una clara discriminación para los conductores españoles tanto particulares como profesionales, al no poder beneficiarse de dichas bonificaciones", opina Fenadismer.
Sin duda alguna, la medida va a suponer un inconveniente (veremos con el tiempo su dimensión) para el libre y fluido comercio entre España y Portugal. En este sentido, a las empresas dedicadas a la Restauración en general, y al Vending en particular, esta noticia les toca directamente en sus planes de negocio, ya que son muchas las entidades que trabajan en la Península Ibérica como si de un mercado unificado se tratase.














