Formatos solubles en monodosis: más eficientes, limpios y cómodos para la restauración

HOSTELVENDING.COM 15/12/2022.- Se trata de un formato de mayor eficiencia y comodidad en términos de coste, idóneo para la restauración automática en sectores como el horeca, OCS y hoteles con servicio de desayuno en la habitación.
¿Conoces ya los formatos monodosis de solubles para las máquinas automáticas? En pos de una restauración automática más Premium, cálida y sorprendente, los formatos monodosis de preparados lácteos y sabores aportan ese plus de calidad y variedad al rincón de bebidas y café, y hacen de la máquina automática un oasis de sabor.
Sus posibilidades la convierten en una gran opción para cualquier entorno en el que la distribución automática y el autoservicio están presentes, con especial mención a los hoteles y sus servicios de desayuno en la habitación, el sector horeca, OCS y otros negocios que incluyen máquinas automáticas de bebidas.

Por su parte, desde la compañía fabricante de preparados solubles para la restauración automática, Laqtia, continúan innovando en este formato para responder a las necesidades de sus clientes, que actualmente se enfocan precisamente en las opciones monodosis de leche y preparados lácteos en polvo.
Más duradera y fácil de conservar
Por su propia naturaleza, la leche instantánea en sobres monodosis presenta una mayor facilidad de conservación, transporte y almacenaje; al tiempo que resulta más económica y duradera que la leche líquida.
En este sentido, Laqtia aporta ese plus de calidad con una leche soluble elaborada a partir de materias primas procedentes de la UE; un producto 100% natural sin aditivos que rompe con esa imagen de baja calidad que hasta no hace mucho se tenía de estos formatos. Pero hoy, las empresas dedicadas a este producto han demostrado el potencial de los solubles en términos de calidad y variedad.
La leche en polvo conserva todos los beneficios de la leche líquida, a las que se suman diferentes ventajas añadidas para su uso comercial. Por ejemplo, se trata de un formato que no necesita refrigeración, y por ende, puede almacenarse a temperatura ambiente.
Por otro lado, su dispensación en sobres herméticos individuales de 4,5 a 5gr ofrece la dosis recomendada y justa para la consumición; un hecho que optimiza el stock y evita el desperdicio alimentario.
Asimismo, su larga duración (con caducidad de hasta 18 meses), trae consigo a las empresas una garantía extra, permitiendo un mayor control del inventario y evitando los costes de rotación que dispone la leche líquida.
En último lugar, la leche soluble ha demostrado ser un producto más seguro, puesto que su bajo contenido en agua impide a los microorganismos surgir y desarrollarse; y más económico, ya que, al no contener líquidos, limita los costes de transporte y el espacio almacenamiento.














