‘Las hormonas de la felicidad necesitan de la cafeína’

HOSTELVENDING.COM 28/11/2024.- Persiste cierta reticencia en torno al consumo de café, probablemente alimentada por mitos antiguos y una comprensión limitada sobre sus efectos. Para desmontar estas creencias, el sector del café cuenta con un aliado clave: la comunidad médica
Si partimos de la premisa “somos lo que comemos”, podríamos preguntarnos: ¿qué somos si bebemos café? Esta metáfora sugiere una estrecha relación entre nuestra dieta y nuestro bienestar físico y mental, y en este contexto, beber café podría simbolizar a una persona activa, alerta y dispuesta a enfrentar la jornada con energía.
El café va más allá de sus efectos inmediatos en la vitalidad. Numerosos estudios han confirmado que esta bebida ofrece beneficios tangibles tanto para la salud física como para el bienestar mental. Sin embargo, aún existen ciertas reservas en cuanto a su consumo; posiblemente alimentada por mitos antiguos y una comprensión limitada sobre sus efectos reales. Esto genera que muchos consumidores aún experimenten dudas o inquietudes sobre los posibles riesgos asociados al café.
Para desmontar estas creencias, el sector del café cuenta con un aliado clave: la comunidad médica, que en los últimos años ha mostrado mucho interés en estudiar los efectos de esta bebida en la salud. Promover el consumo moderado de café como una práctica saludable requiere, entonces, una colaboración estratégica con la ciencia y la medicina. Esta alianza permitiría al sector cafetalero ofrecer información precisa y basada en evidencia científica sobre los beneficios del café, contribuyendo a despejar dudas, desmitificar su consumo y fomentar una comprensión más informada y equilibrada en la sociedad.
La doctora Sofía Melgar, especialista en Anatomía Patológica en el Hospital Vall d'Hebrón de Barcelona, subraya esta conexión entre café y bienestar emocional con afirmaciones contundentes como: “las hormonas de la felicidad necesitan de la cafeína”. Una afirmación que, sin duda, pone en relieve cómo el consumo de café impacta en procesos fisiológicos ligados al bienestar emocional, una faceta crucial de la salud integral.
El café, un producto saludable que precisa de pedagogía
“Aún queda mucho por hacer en la comunicación del café en el ámbito sanitario”, señalan los expertos. En el entorno de la consulta médica, el tiempo destinado a cada paciente es breve, lo que dificulta abordar de manera adecuada el consumo de café, especialmente cuando su recomendación requiere asesoramiento personalizado.
Para distintos nutricionistas, es fundamental establecer pautas claras sobre el consumo de café, de manera que tanto los médicos como los pacientes comprendan sus efectos positivos en la salud. Facilitar a los profesionales acceso a información científica precisa permitiría orientar a sus pacientes hacia decisiones informadas y personalizadas sobre el consumo de café.
El conocimiento médico puede aportar claridad sobre los beneficios del café en un estilo de vida equilibrado.
Poner el énfasis en la persona que lo va a consumir
Distintas figuras sanitarias concluyen en que, más que poner el foco en afirmar si el café es bueno o no para la salud, se debería hacer énfasis en la persona que lo va a consumir y su propia naturaleza. El debate sobre si el café es “bueno” o “malo” genera, en sí mismo, una gran confusión, ya que plantea una falsa dicotomía y nos lleva a pensar que solo una de estas opciones puede ser correcta. La clave radica en comprender que, en el ámbito de la nutrición, nada es absoluto; no existen respuestas universales aplicables a todos por igual. Cada persona tiene una bioquímica única, por lo que lo que resulta beneficioso para unos puede no serlo para otros.














