Lavazza: una mirada al origen para asegurar su futuro en pleno 'huracán cafetero'

HOSTELVENDING.COM 13/08/2025.- De la mano de la Exportadora Guaxupé, Lavazza suscribe su compromiso con el origen sostenible con un mensaje muy claro: cuidar la materia prima es cuidar el futuro del consumo.
No todos los viajes surgen de la mirada romántica. A veces, son estrategias de supervivencia; una necesidad de reconectar para "no perder el norte" entre tanta tormenta de precios, cosechas y volatilidad económica. Y así, Giuseppe Lavazza, cuarta generación al frente de la firma italiana, vuelve a pisar los cafetales de Minas Gerais casi una década después.
Un terreno brasileño que su bisabuelo, Luigi, abonó hace 130 años para que hoy fuese, y así es, uno de los nombres más reconocidos del sector. No obstante, aún siendo un gesto simbólico, ese viaje responde a la advertencia: La advertencia de una tormenta que continúa posándose sobre el café.
Siendo uno de los más importantes a nivel mundial, el café es un mercado que vive, últimamente, al límite. El oro negro juega desde hace años a una ruleta rusa entre sequías, heladas y fenómenos extremos en países como Brasil y Vietnam. A ello se suman las tensiones geopolíticas (desde el bloqueo del Canal de Suez hasta las amenazas arancelarias de Trump), y una especulación que parece no tener fin.
La tormenta perfecta, y así lo confirma el propio Lavazza, quien sostiene que el sector aún no ha salido de ese huracán. Ahora bien, parece haber luz al final del túnel pues, si las cosechas en Brasil y Vietnam van encadenando buenos resultados, se podría ver esa luz en 2027.
En el unattended y en cualquier sector de restauración, la calidad es un escudo
Teniendo presente todo este ecosistema, y más aún, ocupando la parte que nos toca, el café sobrepasa la concepción de mera materia prima: En la distribución automática, es su código fuente; más aún, una declaración de intenciones.
En su caso, Lavazza opta por reforzar la primera relación, la de los productores; en concreto, con la Exportadora de Guaxupé. Estar presente en ese primer origen y regresar con ideas frescas.
La traducción en taza es un café de mayor calidad, elaborado por mezclas consistentes y el proporciones óptimas para mantener ese sabor y cuerpo independientemente de la volatilidad.
Mantener taza a taza la calidad exacta
En el café, como en el unattended, repetición no es rutina: significa garantía, y eso es precisamente lo que espera el usuario final. Quiere que su espresso, café con leche, al cacao o cappuccino sepa igual que el primero que probó en la máquina, y que así sea mañana, y pasado...
Mantener esa consistencia en un mercado tan volátil como el que atravesamos hoy es un desafío al que, compañías como Lavazza, se enfrentan con un pie en el origen y otro en la innovación.
Hablábamos antes de las mezclas y la proporción. Por su parte, la firma tostadora, basándose en el tipo de consumo de hogares, vending y hostelería, propone una mezcla de arábica y robusta; ajustada para equilibrar el sabor, el amargor, la cafeína y el cuerpo del café. Esa receta es, a juicio de Lavazza, una de sus señas de identidad.
Giuseppe explica a El Mundo que si bien venden todo el café que cosechan a precios distintos, el verdadero reto consiste en asegurar que el café que el usuario consume cada mañana siempre sepa igual.
Su estrategia empresarial se basa en ser conservadores con las compras, gestionar los costes de manera eficiente y, si se diera el caso, reducir márgenes antes de traspasar toda esa presión al consumidor.
Una visión que les ha permitido crecer en el ejercicio de 2024: 3.350 millones de euros de facturación, un 9% más que el año anterior. Una cifras aún más significativas si las proyectamos en una caída global del 3,5% en los volúmenes del café ese mismo año.














