Restauración Automática: Respondiendo a los cinco sentidos (Parte 1)

HOSTELVENDING.COM 25/04/2025.- Nuestra premisa: si lo imaginas, lo puedes crear. Respondamos a esos 5 sentidos de cada usuario; ese que se acerca a la máquina esperando encontrar el reflejo de sí mismo. 

Entramos en un nuevo ecosistema, quizás un espacio de coliving o una zona de descanso en un coworking, pero no es un lugar común. Aquí no necesitas esperar en una larga fila ni buscar el menú en un pizarrón. Te acercas a una solución, un sistema automatizado que, con un solo toque, te ofrece una experiencia sensorial completa. 

Lo primero que notas es las suavidad del vidrio bajo tus dedos, que refleja la luz cálida del entorno. Como si te invitara a relajarte. Tu mirada se pierde en una fotografía nítida que adorna la pantalla táctil de la máquina: una imagen de un paisaje montañoso, que ya te transporta a otro lugar, quizás a ese rincón en los Alpes donde algún día soñaste con tomar un café. La vista, además de información, te brinda una invitación visual a disfrutar del momento. 

Al elegir tu bebida, seleccionas la opción que te seduce más: un espresso intenso, un latte suave, o tal vez un cappuccino espumoso. En ese instante, el sonido de la máquina se convierte en una melodía suave: el goteo del café, el susurro del vapor que da forma a la espuma. Cada sonido parece marcar el ritmo de tu momento de calma. 

El café ya está casi listo, y con ello llega el aroma: una fragancia envolvente de café recién molido, capaz de despejar cualquier nube de estrés. El aire se llena de una promesa de bienestar. 

El calor de la taza en tus manos es el siguiente elemento. La temperatura perfecta para que tu café no te queme, pero te brinde la calidez necesaria para disfrutarlo con todos los sentidos abiertos. 

Finalmente, el primer sorbo. El sabor, profundo y equilibrado, te envuelve en una experiencia que va más allá de lo físico. Es como si, de repente, el café estuviera contando una historia, no solo de granos y agua, sino de momentos compartidos y de la promesa de nuevos encuentros. 

Este es el tipo de experiencia que buscan crear las soluciones automatizadas en el mundo del café: una sinergia de sentidos que va más allá de la funcionalidad. 

El café como punto de humanización 

El café ha sido siempre un puente entre las personas. En los últimos años, este simple gesto de compartir una bebida caliente ha pasado a ser un ritual que propicia conexiones profundas. Podríamos decir que esa máquina de café que protagoniza el coffee corner es un facilitador de momentos. Una máquina como la que ofrece Rhea, cuyo enfoque se basa en proporcionar soluciones integradas.  

César Ouro, CEO de Rheavendors Apliven, lo expresa de manera clara: “Ya no vendemos máquinas, vendemos soluciones. Es un proceso en el que debemos mejorar la experiencia del consumidor a través de la máquina.” 

Lo interesante aquí es cómo, al avanzar hacia un ecosistema automatizado, la conexión humana no se pierde. Al contrario, se potencia. La clave está en hacer que la máquina no sea una barrera, sino un medio para lograr experiencias de más valor. 

“No solo buscamos la funcionalidad de una máquina, buscamos emociones a través de los sentidos” dice César. Es aquí donde los avances en automatización se convierten en un punto de humanización, creando espacios en los que la máquina no sustituye la interacción humana, sino que la enriquece.