Inserte su tarjeta de socio y pulse “1” para su copa de Château La Croix

Nueva York disfruta de un nuevo bar de vinos, Clo (en el edificio Time Warner), para aquellos que gustan de una buena cata en un ambiente de última tecnología. La gran novedad de esta vinacoteca es que la carta de vinos se proyecta en una gigantesca mesa digital común para 32 personas.
Con usar simplemente un dedo, los clientes pueden buscar su elección de entre una selección de unos 100 caldos, bien por color, uva, denominación o precio (de 2,5 euros la copa más asequible, hasta precios mucho más desorbitados).
Además, se pueden guiar por las descripciones detalladas de los vinos, para después servirse su propia elección en una de las máquinas de servicio automático. Eso sí, primero hay que cambiar la tarjeta de crédito por una Clo Card, que es la que permite activar las máquinas.
Quizás para los que gustan de examinar las botellas en mano, este sistema puede parecerles un poco sacrílego, como si eligieran su copa en un enorme iPhone. Pero para los que se sienten en cierto modo intimidados por los sommeliers, puede ser una forma más relajada de elegir su copa.














