Compromiso de la industria para promover una correcta alimentación entre los niños

HOSTELVENDING.com 03/11/2015.- De protocolos de colaboración está repleta la agenda política de los gobiernos y, aunque no siempre tienen la continuidad ni la implicación con la que se plantean de inicio, para algunos temas estos acuerdos que implican a multitud de sectores son altamente aconsejables y necesarios.

Lo han visto claro en Italia con la alimentación de los menores de edad, un problema que lejos de solucionarse empeora cebándose con altos índices de obesidad entre una población muy vulnerable. El Ministerio de Salud y ocho asociaciones empresariales, entre ellas la de la industria de la distribución Automática (Confida), han firmado dos protocolos de trabajo para la promoción de la correcta alimentación de los niños en el marco de la Exposición Universal que el pasado 30 de octubre clausuró sus puertas.

Es el colofón a un evento que ha girado en torno a la alimentación del planeta y en el que se han tratado tanto las problemáticas existentes a nivel mundial como las nuevas soluciones y vía de desarrollo no solo para erradicar el hambre en los países más pobres, sino también para luchar contra el sobrepeso en las sociedades occidentales.

Además de la Confida, han participado la Asociación de la Industria del Dulce y la Pasta Italiana, la Asociación Italiana de Industria de Bebidas Alcohólicas, la Asociación Italiana de Publicidad, la Federación Italiana de la Industria Alimentaria, la Federación que reúnen a las empresas de aguas minerales, fuentes de agua y bebidas no alcohólicas, así como el Instituto de Autorregulación de la Publicidad.

El primero de los dos protocolos firmados en la Expo marca los objetivos comunes para mejorar las características nutricionales de los productos alimenticios, dirigidos a la población infantil de entre 3 y 12 años, definiendo compromisos específicos del sector productivo para disminuir el azúcar, las grasas saturadas y la sal y para aportar información adicional en las etiquetas de productos como los cereales para el desayuno, las galletas, los snacks, los refrescos, los zumos, etc.

El documento representa un importante paso adelante en términos de estrategias orientadas a la mejora del valor nutricional de los productos, un enfoque que además se acompaña con la promoción de estilos de vida saludable en edades tempranas.

Las actuaciones también tienen muy en cuenta el ámbito publicitario y por este motivo se han definido una serie de recomendaciones para adaptar y limitar la comunicación comercial relativas a la alimentación y las bebidas dirigidas a los escolares.

En un mundo tan mediatizado como el nuestro, los mensajes que llegan a los niños y a sus familias sobre la idoneidad o no de determinados alimentos no están nada claros y el objetivo, como ha sucedido en nuestro país, es lograr un comunicación más responsable y, por su puesto, honesta.

Los firmantes reconocen que la obesidad y las enfermedades que lleva aparejadas son problemas sociales complejos y son conscientes de que tienen un papel que desempeñar en su solución. También comparten, con las instituciones internacionales autorizadas, la creencia de que la estrategia más eficaz para combatir estos fenómenos reside en la adopción de un enfoque integrado y multifactorial, en el que la promoción de la actividad física desempeña una tarea esencial: “no hay, de hecho, alimentos buenos o malos, solo los estilos de vida saludables”.

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