“Debemos crear entornos saludables en los que el acceso a frutas y verduras sea asequible”

HOSTELVENDING.com 02/02/2018.- 5 AL DÍA es una Asociación sin ánimo de lucro que promueve el Consumo de Frutas y Hortalizas y el fomento de hábitos de vida saludable entre la población.

-5 al Día, el mensaje es sencillo y en estos años de trabajo ha ido calando, pero según datos de mayo que aportaba AECOSAN extraídos de la Encuesta Nacional de Alimentación en Población Infantil y Adolescente “solo el 30 % de niños y niñas entre 6 meses y 17 años consume fruta fresca o zumos naturales más de una vez al día, y tan solo el 3 % consume hortalizas más de una vez al día”. ¿Por qué no se llega a ese mínimo que proponéis?
Uno de los factores clave para que los niños consuman frutas y hortalizas, es la familia, es decir, si hay FYH disponibles en casa y los padres las consumen, es más fácil que los niños también lo hagan. No obstante también pueden influir otros factores, por ejemplo la calidad sensorial de las frutas, la costumbre de comer verduras en la familia, el entorno alimentario en la escuela y también la exposición publicitaria de que productos ultra procesados que terminan sustituyendo a las frutas y verduras las en muchos de sus momentos típicos de consumo, por ejemplo el postre o las meriendas.

-Desde la Asociación habéis destacado siempre el desayuno como la comida más importante del día, ¿reside aquí la base de una dieta equilibrada? ¿Qué es lo más recomendable para empezar el día?
El desayuno es una ingesta tan importante con el resto y es clave en las personas que comen tarde al medio dia y se levantan pronto. El desayuno habitual podrían estar relacionado con el una mayor capacidad cognitiva y rendimiento intelectual en la infancia, e incluso con la prevención de enfermedades crónicas y la obesidad, aunque las evidencias no son sólidas, y muchas veces son contradictorias. Sin embargo es cierto que hay personas que no tienen la costumbre de desayunar o solo lo hace a base de algo bebido. En esos caso, la merienda de media mañana tome relevancia, pues en esa ingesta podremos completar el desayuno. Hay miles de combinaciones posibles para hacer un desayuno saludable. Una combinación adecuada podría ser el pan integral con un lácteo bajo en grasa y una fruta, pero también podría haber otras que incluyan otras combinaciones de alimentos saludables como hortalizas, frutos secos, bebidas vegetales, yogur, huevos, quesos, legumbres, pescados, etc.

Desde 5 al día promovemos el consumo de las frutas en distintos momentos del día, uno de ellos es el desayuno, el que podemos incluir frescas de temporada, preparadas y listas para tomar, mejor si son de producción local, pero también frutas desecadas (dátiles, pasas, ciruelas, albaricoques) y pequeñas cantidades de zumos naturales o 100%. Otras opciones muy comunes en las personas que suelen desayunar habitualmente son el uso de aguacate como grasa para untar, o trocitos de tomate natural en rodaja, rallado o untado, palitos de zanahoria, pepino, rabanitos, apio, etc., para acompañar el pan.

-¿Qué debemos hacer para revertir los datos anunciados en el estudio que realizáis junto a LIDL?
Para promover el hábito de desayunar de un modo saludable es clave que la familia sea coherente con un plan de salud donde los padres sirvan de ejemplo a sus hijos. Si no se tiene el hábito de desayunar habitualmente, debe empezarse poco a poco, por ejemplo, incrementando paulatinamente los días de la semana en los que se desayuna, incluir los alimentos que menos cuesten, consolidar en el tiempo y ampliar poco a poco.
Algunas claves podrían ser:
• Desayunar en familia siempre que sea posible.
• Adelantar algo de los preparativos, antes de irse a la cama
• Disponer de un tiempo suficiente y de una variedad de alimentos saludables adecuada a los gustos de la familia.
• Tener paciencia en el proceso de aprendizaje del niño y de toda la familia
• Dormir las horas adecuadas para cada edad y evitar trasnochar.
• Adaptar las raciones de alimentos a la edad
• Hacer partícipe a los niños en la preparación del desayuno.

-¿Por qué nos alimentamos mal? ¿Es el estilo de vida moderno el principal causante? ¿Es la falta de información o formación?
La disponibilidad de alimentos facilita su consumo, si ese acceso es mayor para aperitivos, comida rápida, bollería, refrescos, etc., la probabilidades de su elección se multiplica. Esto es lo que ocurre hoy, vivimos en entornos que favorecen hábitos alimentarios insanos, es que es más fácil y asequible comer mal. A este escenario contribuye en gran medida la presión publicitaria que sufre el consumidor, en especial los niños y jóvenes, que nos hace estar expuestos y consumir de forma fácil y económica, alimentos ultraprocesados ricos en energía, grasas, azúcar o sal, tales como la bollería, comida rápida, embutidos, bebidas y alimentos azucarados, aperitivos fritos, etc., que terminan desplazando a otros saludables como las frutas, hortalizas, agua, legumbres, frutos secos, cereales integrales como el pan, la pasta o el arroz, etc.

-Fruta y verdura, al natural y sin rodeos, ¿está el mercado rodeado de propuestas que pueden inducir al error?
Adaptarse a los preferencias del consumidor es un reto para los que producen y distribuyen frutas y verduras. Si hace unos años el consumidor premiaba la apariencia y la durabilidad, hoy se pide sabor, textura, aromas, renunciando en cierto modo al aspecto, en definitiva, se busca la experiencia sensorial. Eso hace que no solo los productores deban recuperar variedades más tradicionales con cualidades sensoriales intensas, sino trabajar en otras que cumplan con esos estándares. Pero además de este reto a la hora de escoger alimentos que no defrauden a los sentidos, el consumidor se expone a una gran cantidad de alimentos procesados ricos en grasas, azúcares y sal, que usan a las frutas y verduras como reclamo para vender sus productos… desde el yogur azucarado con la ridícula cantidad del 10% de fruta y además en forma de mermelada, a la lasaña precocinada congelada rica en sal y grasas y que apenas aporta 30 g de espinacas por ración.

Hoy además de las frutas y hortalizas frescas, el consumidor puede acceder a otras igualmente saludables que han sido mínimamente procesadas para facilitar su consumo, tal es el caso de las bolsas de verduras listas para consumir en crudo o cocinadas.

-Los zumos preparados pueden estar dentro de esta categoría que mencionaba antes (productos que no son tan saludables como se anuncian), ¿desde 5alDía son recomendables o no, sustituyen a una de esas 5 raciones recomendadas?
Desde 5 al día se recomienda tomar las frutas y hortalizas frescas enteras sin triturar o licuar, pues el consumo excesivo de zumos de frutas y licuados, pueden potenciar el consumo de azúcares libres e incrementar el riesgo de obesidad. Masticar los alimentos hace que sus nutrientes, entre ellos los azúcares, se absorban más lentamente, además de aportar una mayor sensación de saciedad. Por eso, si se toma en forma de zumo, entendiendo esta bebida como zumo exprimido natural o comercial y los procedente de concentrado reconstituido al 100%, no se debe exceder de 150 ml, y no más de una vez al día.

Los néctares y otras bebidas de frutas que no contienen 100% frutas, contengan o no azúcar añadido, no entran en las recomendaciones de 5 al día, debiéndose evitar. El zumo contiene parte de los nutrientes de las frutas y hortalizas de los que proceden, sin embargo el azúcar que aportan computan en la dieta como "azúcar libre" lo que equivale a "azúcar añadido" al contrario que ocurre con el que contienen la frutas y hortalizas enteras, además apenas contienen fibra.

-Desde la OMS se recomienda poner tasas a los alimentos menos sanos, hay administraciones que optan por prohibir determinados alimentos en canales concretos, como pasa con el vending, ¿desde 5alDía qué pensáis que es más efectivo?¿Hay que prohibir?¿Hay que limitar pero además proponer políticas activas que favorezcan el acceso a alimentos más sanos?
Desde 5 al día creemos que la clave está en crear entornos saludables donde el acceso a alimentos claves para la salud como las fruta y hortalizas, sea fácil y asequible, y para que esto sea posible es necesario que confluyan múltiples factores como la calidad sensorial, la disponibilidad, la información al consumidor, la reducción de la exposición a alimentos poco saludables, la educación nutricional de la población, la reformulación de alimentos y por supuesto, precios asequibles. Por lo tanto, las medidas deben ser integrales y coherentes, y las políticas que las promuevan deben considerar todas las herramientas a su alcance. La prohibición de algunos alimentos y bebidas en determinados entornos, por ejemplo en el escolar o sanitario, y la aplicación de tasas a alimentos superfluos, son sólo algunas de ellas.

-Desde 5alDía os centráis en la educación y la formación. Los escolares empiezan a conocer la teoría pero ¿la fruta y verdura al natural pueden competir con el bombardeo de anuncios, regalos, promociones, que acompañan a los alimentos elaborados?
El gasto de la industria alimentaria en publicidad de alimentos insanos es descomunal si se compara con el de las empresas que comercializan frutas y hortalizas frescas. Esa sobreexposición a estrategias de marketing súper agresivas (precio, salud, regalos, etc.,), en especial las dirigidas a niños y jóvenes, contribuye a crear y consolidar el entorno obesogénico en el que vivimos, por lo tanto, es una barrera para las políticas de salud pública y para qe los mensajes de asociaciones como 5 al día generen cambios para promover hábitos alimentarios saludables. La regulación de estas estrategias debería estar controlada desde la administración, puesto que la autorregulación de la industria alimentaria en la publicidad, ya ha demostrado que no funciona.

-En la industria del vending cuesta cambiar la oferta porque, al ser limitada y por cuestiones de rentabilidad, los gestores prefieren poner productos que se venden rápido. Chocolatinas y patatas tiene mejor salida que la fruta. Para un consumo de “conveniencia” seguimos prefiriendo producto azucarados, “nos lo pide el cuerpo”. ¿Están permitidos esos caprichos o recompensas en una dieta equilibrada?
Esos productos no deberían estar presentes de modo habitual en la alimentación, pero el hecho de hacerlos disponibles en muchos puntos de venta las 24h, facilita su consumo. La presencia de los alimentos en máquinas expendedoras debería ser coherente con las políticas de salud pública… no se puede entender que en un colegio o en un hospital haya 4 veces más oferta de alimentos y bebidas superfluas que agua, frutos secos crudos, bocadillos, frutas, etc.

-¿Qué piensa que se podría hacer desde la industria del vending para favorecer una alimentación más equilibrada al margen de compensar la oferta?
Compensar la oferta es clave y esto requiere no solo recontar uno y otro alimentos, sino también aplicar las mismas técnicas de parking usada para los alimentos superfluos, a los saludables… por ejemplo la posición de unos u otros en la máquina, el precio y la publicidad del soporte.

La prevención es más coste eficiente que el tratamiento… y las empresas deben ser conscientes y responsables del impacto que sus productos tienen para la salud de sus clientes, y estos son cada vez más críticos e interesados en seguir estilos de vida saludables. Por lo tanto, apostar por hacer más disponible los alimentos sanos como las frutas y hortalizas, más que verse como una imposición, se debe entender como una oportunidad para las empresas del sector de diferenciarse y de demostrar que están alineadas con lo que el consumidor necesita y cada vez exige: calidad y salud, a precio competitivo.

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