Ruta exclusiva con productos frescos para una restauración automática sostenible

HOSTELVENDING.COM 19/12/2022.- La ruta de IVS Ibérica está obrada por un operario en exclusiva que transforma en un vehículo refrigerado productos de alimentación con una vida corta. La compañía continúa reforzando una restauración automática responsable con su plan de acción medioambiental.
Actualmente, se producen cerca de 1.300 millones de toneladas de desperdicio alimentario cada año, según confirma la ONU para la Agricultura y la Alimentación. Sin ir más lejos, en España es una de las principales problemáticas vinculadas al medio ambiente, y sus efectos tienen más impacto del que quizá el consumidor sea consciente.
Frente a ello, las compañías de la distribución automática están demostrando su conciencia respecto al tema y no dejan de innovar, invertir y adoptar nuevas medidas anti-desperdicio. Y es que relación entre el sector de la restauración automática y la sostenibilidad cada vez es más estrecha. Casi a diario, hallamos nuevas prácticas circulares en la industria: desde el propio café que brindan las superautomáticas o las free standing de bebidas, certificado, de origen y de agricultura sostenible; pasando por el transporte y logística hasta el propio funcionamiento de la máquina.
En un contexto marcado por la eficiencia energética, la sostenibilidad y la necesidad de aportar soluciones respetuosas con el medio ambiente, empresas como IVS Ibérica continúan su andadura y evolución ecofriendly con distintas acciones que aseguran, no solo un servicio más ecológico, sino de máxima calidad.
Cuando hablamos de desperdicio alimentario, en la mayoría de los casos surge porque estos alimentos se tiran, se enmohecen en los almacenes o por una sobreproducción. Frente a ello, IVS ha desarrollado una ruta exclusiva de productos frescos que les permite no desperdiciar alimentos y que estén en los distribuidores en las condiciones más óptimas.
¿Cómo se realiza esa ruta de productos frescos?
Esta ruta de IVS Iberica está ejecutada por un operario exclusivo que transforma en un vehículo refrigerado productos con una vida corta como: sándwiches, bocadillos, ensaladas, fruta, yogur o platos listos para comer, entre otras opciones. Asimismo, las máquinas automáticas tienen el producto necesario, con un stock planeado y con las mejores condiciones de temperatura y caducidad previas, sin desperdiciar ningún alimento.
Actualmente, esta ruta da servicio a cerca de 14 clientes, aunque es un servicio en continua expansión, puesto que este tipo de productos frescos y saludables son cada vez más demandados por los usuarios finales.
La huella ambiental del producto
Con la implementación de estas rutas, la compañía no solo crea trayectos de distribución más cortos y eficientes para reducir el desperdicio de alimentos, sino que además reducen la huella ambiental del producto, que está determinada por la distancia que recorre, la cantidad de energía empleada en el transportarlo y los materiales utilizados para fabricarlo.
Una ruta que radica en toda una andadura de sostenibilidad
Como ocurre en general con las empresas del sector, el valor del Grupo IVS está estrechamente ligado a su capacidad de operar de forma sostenible y de estar al servicio de la comunidad; y en su caso, les preocupa especialmente la gestión de los principios ESG (Ambientales, Sociales y de Gobernanza).
Tal y como confirman desde la compañía, la sostenibilidad les permite trabajar mejor en todos los frentes, generando un mayor impacto en los ecosistemas naturales, así como en el bienestar de las comunidades, las personas y todas las partes interesadas; pidiendo a todo el equipo que conforma IVS que compartan las políticas del grupo.
A día de hoy, más de 2.500 personas contribuyen al desarrollo de la empresa, trabajando en 4 países europeos. En ese aspecto, este año “nos esforzaremos por contribuir a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible definidos en la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas, tomando también como referencia el Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia, adoptando acciones concretas para prestar un servicio cada vez más responsable, reducir las emisiones para garantizar la salud de la comunidad y contribuir a mitigar el cambio climático mediante soluciones tecnológicas cada vez más “verdes”, como la energía fotovoltaica, la optimización de las rondas, la recuperación de los posos de café para la producción de energía limpia, la recuperación y no eliminación de los residuos, y la reducción del consumo de energía”, explica el grupo.